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Rueda de la Fortuna

La Rueda de la Fortuna

Habemos personas que durante buena parte de nuestras vidas estuvimos acostumbrados a una sola cosa …. Triunfar… que todo nos saliera a como lo teníamos planeado. De pequeño ser buenos niños con maravillosos Padres que nos daban de todo. Fuimos muy buenos en los deportes, populares en la escuela y cuando llegamos a la universidad la Diosa de la Fortuna nos continuaba sonriendo. Buenos amigos, estudiando la carrera universitaria que te gusta, novias por aquí, novias por allá, viajes, congresos, en fin un encadenamiento de eventos en nuestras vidas cuyo resultado siempre era positivo para nuestros intereses. Este tipo de cosas hacen que nuestro esquema mental se prepare únicamente para lo bueno, y haga pensar que la vida es simplemento eso….. una cadena de hechos en los que no importa lo que tú hagas; con sólo el hecho de que tú estés participando; el resultado siempre será positivo para ti.

El problema es que siempre, tarde o temprano, en público o privado, te visita la famosa “Rueda de la Fortuna” de la vida; donde un día estas en la cima, al siguiente, ya no tanto y al siguiente estás en el punto más bajo. Con esto lo que simplemente quiero ilustrar es que como seres humanos tenemos que siempre estar preparados a que la vida es un conjunto de elementos y acontencimientos que por regla general o regla permanente, nunca va siempre en línea recta o en línea ascendente. Siempre va con subidas y bajadas, unas mas altas que otras, curvas visibles o curvas con puntos ciegos, neblina, tormenta, lluvia, en fin una carretera que siempre te presentará algún obstáculo; y que tendrás que estar preparado para superarlo. Lo que no se puede permitir es que te quedes paralizado por un momento malo de tu vida; que al final no es culpa de un destino o de un Ser Superior; simplemente es parte de vivir, nada más. Solamente el que no vive no sufre, no llora, no ríe, no tiene problemas, ansiedades. Pero al final todos llevamos ese niño por dentro que le encanta ir al parque de diversiones y subirse a la “Rueda de la Fortuna” porque al final es emocionante, la adrenalina de no saber donde quedarás cuando pare hace que tu corazón palpite a mil por hora. Es la vida, es vivir. No te desesperes que no siempre estarás abajo; en algún momento; cuando menos lo pienses la rueda se detendrá y tú estarás en el punto más alto; desde el cual podrás ver todo el parque de diversiones, observarás las estrellas y sobre todo; analizarás y verás tu propia vida, las perspectivas de la misma, las montañas que te tocará escalar y si tienes suerte podrás ver con claridad el camino que has de tomar

Hoy puedes estar enfrentando alguna situación compleja. Al final tendrás que tomar una decisión para salir de ella. Tendrás dos caminos, el primero es que tú tomes las riendas del problema, lo enfrentes y busques las soluciones. La segunda es que te aboques a la Diosa Fortuna, como hacían los romanos en la época de Vespasiano, Tito, Trajano o el abominable Domiciano quien en vida se hizo llamar Dios. Y esperes y simplemente esperes y sigas esperando a la que la Diosa Fortuna en algún momento pose tu mirada  en ti y te sonría.

Fortuna, Imperatrix mundi

O fortuna

Velut luna,

statu variabilis,

semper cresis,

aut decrescis;

vita detestabilis,

nunc obdurat

et tunc curat

ludo mentis aciem

egestatem,

potestatem,

dissolvit ut glaciem.

 

Oh Fortuna,
como la Luna
variable de estado,
siempre creces
o decreces;
Vida detestable
ahora oprime
después alivia
como un juego,
a la pobreza
y al poder
derrites como al hielo.


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